En las últimas horas se produjo la muerte de la segunda agente de la Policía Bonaerense tras haberse contagiado de COVID-19. Se trata de la oficial Daiana Soledad Barrios, agente de la Policía Local de Avellaneda, de 32 años y madre de dos hijos, uno de ellos lactante.
De acuerdo a información oficial, la agente ingresó este viernes por sus propios medios a la Clínica Avellaneda Medical Center con dificultades respiratorias y síntomas compatibles con COVID-19. Desde allí fue trasladada al Policlínico Lomas, en Lomas de Zamora, donde se decidió hisoparla. Estuvo internada hasta que le informaron que era paciente positiva de coronavirus, y se conmocionó de tal modo que tuvo un infarto.
El panorama empeora si se tiene en cuenta que el marido Daiana padece una insuficiencia crónica: tiene apenas un tercio de su capacidad pulmonar y está asistido con un respirador. Según sus compañeros, la oficial fue enviada a hacer custodia de bancos y a cumplir funciones en la Villa Azul, donde se registró un foco de contagios de coronavirus.
(Fuente: Data Judicial)
