El hecho, que trascendió recién este martes, ocurrió alrededor de las 3 de la madrugada del sábado. El ladrón consiguió saltar la reja perimetral del Pejerrey Club –ubicado en Av. Cervantes y Guido Spano- y se dirigió hasta uno de los móviles de Defensa Civil que durante la noche queda estacionado allí dentro. 

De un golpe reventó los cristales de la ventanilla del vehículo, provocándose profundas heridas sangrantes. Aún así, llegó a tomar varios elementos de trabajo y pertenencias del personal de Guardavidas, que a diario utilizan tanto prevención como para seguridad de los habitantes del barrio.  
Los ruidos alertaron al empleado de seguridad del estacionamiento del predio, que corrió al malviviente. Sin embargo, herido y todo, éste logró escapar y permanece prófugo hasta ahora. Lo llamativo del ilícito fue que se perpetró al lado del Destacamento policial de La Ribera, y aún así esto no fue impedimento para que el hampón intentara robar y huir.