Quilmes se entrenó este miércoles en turno matutino, desde las 9.30 y a puertas cerradas en el campo auxiliar del Estadio Centenario, donde hizo trabajos físicos y técnicos de cara al partido del próximo lunes como local ante Agropecuario de Carlos Casares (desde las 19.30 y con arbitraje de Leandro Rey Hilfer).

La actividad se inició con una entrada en calor física, en un circuito de fuerza preventiva, con saltos en cajones, pesas y trineos. Posteriormente se realizaron toques de pelota en grupos con presión, y un trabajo de tenencia. Finalmente el plantel se dividió en tres equipos de ocho jugadores cada uno y participaron de partidos de fútbol en espacios reducidos con arcos pequeños. Mientras dos equipos se enfrentaban, el restante hacía pasadas intermitentes. Los tres iban rotando para hacer ambas actividades.

Todo terminó con ejercicios de elongación sobre colchonetas. Adrián Calello dejó atrás la sobrecarga que tenía en el aductor izquierdo y por la que había abandonado la práctica del martes, mientras que Mariano Barbieri se recuperó de una distensión muscular en el recto anterior izquierdo. Los dos se entrenaron con normalidad y están a disposición del entrenador Facundo Sava para el partido del lunes.

Por otra parte, hicieron trabajos de kinesiología Brandon Obregón (contractura en el gemelo izquierdo, le harán una ecografía), Juan Cruz Anastasio (distensión muscular en el isquiotibial izquierdo), Mariano Pavone (desgarro en el recto anterior derecho) y Rodrigo Saracho (realiza fortalecimiento muscular tras un desgarro en el bíceps femoral izquierdo). No estuvo en la práctica Fernando Luna, porque será operado de la rotura de meniscos en la rodilla derecha. Ninguno llegará al partido ante Agrupecuario.

Quilmes volverá a entrenarse este jueves por la mañana, desde las 9.30 y a puertas cerradas en el campo auxiliar, donde volverán a hacerse trabajos técnicos.