Pasaron casi 70 días de el último partido de Defensa y Justicia, la derrota 2-1 ante Olimpia en Asunción por el grupo G de la Copa Libertadores 2020. Sin embargo, Ezequiel Unsain mantiene la calma, no imagina cercano el regreso a los entrenamientos y asegura que debe haber otras prioridades antes del regreso a la competencia.

- ¿Cómo hacés con el entrenamiento? En otro puesto te la podés ingeniar, ¿pero el arquero cómo hace?
Nosotros nos tenemos que adaptar a lo que hacen los jugadores de campo en los entrenamientos en sus casas. Hacemos prácticamente lo mismo. Pero nada de entrenamientos específicos, salvo el que cuente con la superficie adecuada para hacerlo. Obviamente, no me puedo tirar. Entonces hago lo que hacen mis compañeros. Intento copiar sus trabajos aeróbicos, en menor medida, porque no estamos acostumbrados. Pero sí los trabajos de fuerza.

- ¿Cuánto tiempo aguanta un arquero sin poder entrenarse como ustedes suelen hacerlo?
Yo creo que aguanta. Después, el tiempo de adaptación te permite reacomodar nuevamente las técnicas. De hecho, cuando nos vamos de vacaciones, ahí sí queremos olvidarnos de los guantes y de la ropa larga y no hacemos trabajos específicos de arquero. Yo creo que no es tan indispensable comenzar a entrenar en este momento. No porque no tenga ganas, la realidad es que me estoy muriendo de ganas: quiero volver a lo que me gusta hacer. Me parece que hay un montón de prioridades y un montón de recaudos que tomar antes que programar una vuelta al fútbol.

- ¿Entendés este encierro o considerás que el deportista ya debería tener un protocolo sanitario que le habilite la chance de mantenerse en forma?
Que estemos cumpliendo la cuarentena me parece lo más sensato y correcto. Atrás de cada uno de nosotros hay un montón de familias, hijos, mujeres, padres, abuelos. No podemos arriesgar la salud de cada uno de ellos, más allá de la nuestra, solo con el objetivo de mantenernos en forma física en el campo de juego. Es obvio que a todos nos encantaría. Y es obvio que estamos deseando que vuelva todo lo antes posible. Pero debemos ser medidos, debemos ser sensatos, debemos establecer las prioridades. Me parece que hoy en día, en el país y en el mundo, hay otras prioridades que atender antes que la vuelta al fútbol. Obviamente me pone contento que las autoridades pertinentes estén realizando un trabajo específico para programar la vuelta al fútbol. Pero nosotros debemos abocarnos a cuidarnos entre nosotros, a cuidar a nuestra familia y a cuidar a la sociedad también.