La Policía Bonaerense detuvo en las últimas horas a dos menores de 15 y 17 años, acusados de asesinar de un disparo al comerciante Rodrigo Soria (40) para robarle su auto en el partido de Avellaneda. La víctima agonizó durante 13 días en el Hospital Fiorito, pero murió a pesar de los esfuerzos médicos.
Soria vivía desde hacía un año y medio con su familia en la localidad de Bernal, en Quilmes. Era padre de un niño de 10 años y una nena de 2, además de una esposa que esa noche lo esperaba en su casa. Sin embargo, a las 21.26 del miércoles 29 de enero, cuatro adolescentes lo abordaron en la calle Rivero al 500.
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Murió un comerciante quilmeño baleado por delincuentes en AvellanedaEl trágico hecho de sangre quedó registrado por las cámaras de seguridad. En las imágenes se ve cuando bajan cuatro ladrones de una camioneta Ford EcoSport. Le apuntaron con una pistola para que entregara su Peugeot 308 y uno de los asaltantes le hizo sacar el buzo. Luego hubo un forcejeo hasta que uno de los delincuentes le disparó en el pecho. Tras herirlo de muerte, la banda huyó en los dos vehículos en tan sólo 20 segundos.
La víctima alcanzó a hablarle a un vecino que se acercó a asistirlo mientras estaba tirado en la calle. Desde allí lo llevaron al Hospital Fiorito, donde agonizó 13 días. En ese lapso contrajo un virus intrahospitalario que le afectó el pulmón herido y luego se extendió al que estaba sano. Falleció el 11 de febrero, minutos antes de las siete de la mañana.
ATRAPADOSDos de los integrantes de la banda fueron atrapados tras una persecución en Gerli. Se trata de dos adolescentes de 15 y 17 años, ambos oriundos de Villa Zavaleta (CABA). Según los investigadores, el menor de ellos sería quien mató a Soria. "Es el que hostigó durante esos 20 segundos a Rodrigo", dijo Rodolfo, hermano de la víctima.
La causa, caratulada como “homicidio”, fue investigada por la fiscal Alejandra Olmos Coronel, de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 1 Descentralizada de Avellaneda, dependiente del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. Sin embargo, dados los acontecimientos, ahora pasará a una fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil.
