El Cervecero venció anoche como local por 3 a 2 a Nueva Chicago, por la vigésimo tercera fecha del campeonato 2018/2019 de la Primera "B" Nacional. Los de Leonardo Lemos lo jugaron como una final y ganaron bien.
Tenía que ganar y ganó. En el Estadio Centenario, Quilmes jugó el partido como una verdadera final y derrotó a Nueva Chicago por 3 a 2. Desde el primer minuto lo salió a buscar, jugó en campo rival y mostró personalidad, al punto de dar vuelta un partido que lo empezó perdiendo. Además salió de la zona del descenso. Noche redonda.
El partido comenzó con los dos decididos a ir a buscar. Encuentro dinámico, de ida y vuelta, aunque era Quilmes el que metía más gente en campo rival, más allá de que no se generaban situaciones de peligro. El Cervecero iba y se desprotegía atrás. Y a los 8 lo pagó caro: un rechazo fallido de cabeza de Raúl Lozano le regaló una contra a Chicago, que se fue a toda velocidad con El Cervecero saliendo, pelota para la derecha que tomó Alejandro Melo, enganche y habilitación para Nicolás Franco que en el área definió cruzado y puso el 1 a 0. La visita se ponía en ventaja en su primera llegada y empezaba a complicar la historia. Quilmes trataba de reaccionar pero lleno de nervios, ante un Chicago que se envalentonaba con la apertura del marcador. Sin embargo, a los 28 El Cervecero llegó claro, cuando tras un corner desde la derecha de Lozano, cabeceó Juan Imbert, tapó abajo el arquero Agustín Silva y el rebote le quedó a Federico Anselmo, que remató por arriba del travesaño. Al minuto respondió Chicago otra vez de contra, cuando Arnaldo González habilitó a Juan Sánchez Sotelo, que le dio entrando al área y la pelota reventó el travesaño. Y a los 46, la visita tuvo la última, con otra contra, Franco quedó mano a mano con Marcos Ledesma pero definió a las manos del arquero. El primer tiempo se fue con un triunfo parcial de Chicago, hasta ahí, merecido.
SE RECUPERO DEL GOLPE, APROVECHO EL HOMBRE DE MÁS Y FESTEJOEn la segunda etapa, antes del minuto Quilmes se encontró con algo impensado. Saque del medio, pelotazo al área, peinó Federico Anselmo y Adrián Scifo despejó con pifia y la pelota le dio en su brazo: penal. El mismo Anselmo le dio abajo, contra el palo izquierdo, y puso el 1 a 1. El Cervecero lo igualaba y empezaba otro partido. A los 7 minutos y por un golpe en la cabeza, Alan Alegre dejó la cancha y fue reemplazado por David Ledesma. Quilmes iba más decidido, y a los 15 minutos se escapó Tomás Blanco, Adrián González lo derribó en el borde del área, vio la segunda tarjeta amarilla y se fue expulsado. Y a los 20, Quilmes lo dio vuelta. Porque Blanco metió un centro desde la izquierda, despejaron de cabeza a medias, no logró controlar Matías Noble y la pelota le quedó a Federico Anselmo, que remató de zurda y de primera, y clavó el balón abajo contra el palo derecho: 2 a 1. El Cervecero lo daba vuelta y con un jugador más lo seguía buscando, ante un Chicago obligado a salir. A los 28, David Drocco reemplazó a Matías Noble y Brandon Obregón pasó a jugar por izquierda, y a los 35, el propio Obregón liquidó la historia. Federico Anselmo y Tomás Blanco se molestaron entre sí en un mano a mano con el arquero Agustín Silva, que salió jugando con los pies, tocó corto y le regaló la pelota al volante, que definió por arriba del guardameta y puso el 3 a 1. Eric Ramírez entró por Obregón y se paró en la derecha. En los minutos finales la visita fue a buscar y a los 46 descontó. Agarrón de Eric Ramírez a Lucas López en el área y penal. Le dio Alejandro Melo, la pelota pegó en el ángulo izquierdo, dio en la espalda de Marcos Ledesma y se metió: 3 a 2 para ponerle suspenso hasta el final. Chicago fue como pudo en los últimos instantes, El Cervecero se defendió bien y el encuentro se fue en triunfo.
DESAHOGO TOTALEl triunfo fue merecido. Luego de un primer tiempo parejo en el que la visita había tenido más situaciones y lo ganaba con justicia, en el segundo pasó de todo. De entrada Quilmes se encontró con un penal inesperado, enseguida pasó a tener un hombre más y lo dio vuelta con un gol de otro partido. A partir de ahí manejó las acciones con autoridad, llenó a Chicago de confusión y le hizo el tercero. El descuento final fue sólo para la estadística.
Quilmes ganó y salió de la zona del descenso. Por primera vez en mucho tiempo, salió a buscar el triunfo decidido y con personalidad, y fue protagonista en casi todo el encuentro. Y gracias a ello tuvo su premio.