Otra vez y como le había pasado ante Aldosivi hace algunas semanas, El Cervecero ganó el partido menos pensado. Anoche, en el estadio "Nuevo Monumental", Quilmes agudizó la crisis futbolística de Rafaela y lo derrotó por 2 a 0. Los de Mario Sciacqua hicieron un partido inteligente, fueron sólidos y efectivos, y quedaron a un punto de salvarse del descenso.
De entrada Rafaela fue el que tomó la iniciativa y con pelotazos y pases largos a las bandas metía al Cervecero en su campo, aunque no lograba generar peligro. Quilmes mantenía el orden y cuando recuperaba trataba de ir con la velocidad de sus volantes externos. Y a los 15 minutos, en la primera contra con espacios que tuvo, Quilmes se puso en ventaja. Francisco Ilarregui habilitó bien a Felipe Cadenazzi, que remató de zurda, tapó el arquero Ramiro Macagno con rebote hacia adelante, el mismo Cadenazzi cabeceó por encima del cuerpo del uno, Oscar Carniello la sacó sobre la línea pero le dejó la pelota servida a Leandro González, que metió otro cabezazo para mandar el balón al fondo del arco. Quilmes lo empezaba a ganar temprano aprovechando rebotes y el local, obligado, lo iba a buscar con más gente. El Cervecero casi aumenta a los 27, cuando Leandro González vio adelantado al arquero, remató desde la mitad de la cancha y la pelota pasó muy cerca del palo izquierdo. Rafaela llegó claro recién a los 35, con un tiro libre directo de Ángelo Martino, y Emanuel Trípodi mandó la pelota al corner. Y a los 42 volvió a llegar el local, con un remate de afuera de Enzo Gaggi que tapó abajo Trípodi. En los minutos finales Rafaela lo buscó sin claridad ante un Quilmes bien parado, hasta que se fue la primera etapa. En un partido parejo, El Cervecero lo ganaba porque había aprovechado su primera llegada y porque hasta ahí mantenía un buen orden y solidez defensiva.

GONZALEZ VOLVIO A APARECER Y LIQUIDO LA HISTORIA
En la segunda mitad, Matías Mansilla saltó a la cancha por Jonatan Torres, se ubicó en el doble cinco, pasó Nicolás Castro a la izquierda y Leandro González fue de punta. El local tenía la pelota pero no lograba ser profundo ante un Quilmes bien plantado, y apostaba al remate de afuera, como el que tuvo Ángelo Martino a los 13 pero la pelota se fue por arriba. Quilmes llegó recién a los 21, con un remate de Francisco Ilarregui, pero tapó Macagno. El local tenía más la pelota pero iba sin ideas ante un Cervecero sólido, que cuando recuperaba tiraba pelotazos a los delanteros, que no lograban aguantar la pelota. Así, el partido se hacía malo y sin situaciones. A los 33, Matías Nouet reemplazó a un agotado Ilarregui. Quilmes no lograba dominar el juego pero a los 34, Emiliano Romero lo tomó a Felipe Cadenazzi en el área y el juez pitó el penal. A los 35 el que le dio fue Matías Nouet pero tapó el arquero Macagno contra el palo izquierdo. Afortunadamente para Quilmes, el penal errado no llegó a ser un golpe anímico, porque un minuto más tarde, encontró el segundo. Lateral al área desde la derecha de Braian Lluy, la bajó de pecho Nouet, toque de Cadenazzi y en la izquierda apareció solo Leandro González para rematar cruzado y de zurda desde el suelo, y meter la pelota contra el palo izquierdo: 2 a 0. Quilmes liquidaba el partido a poco del final y respiraba. Para tener la pelota, a los 39 entró Miguel Caneo por Nicolás Castro, que se fue lesionado. Rafaela, golpeado, iba sin ideas y El Cervecero controlaba las acciones sin problemas. Así fue pasando el tiempo hasta que el juez pitó el final.