No lo pudo sostener. Esta tarde, en el estadio “Doctores José y Antonio Castiglione” de Santiago del Estero, con arbitraje de Diego Ceballos y bajo una intensa lluvia, Quilmes le ganaba bien desde los diez minutos de juego a Mitre. Con ese resultado parcial salía de la zona del descenso y quedaba a dos puntos del reducido.

El partido comenzó con el local yendo a buscar con más decisión, Quilmes esperaba y trataba de salir rápido de contra. Y luego de un par de llegadas aisladas de Mitre, en la primera que tuvo El Cervecero se puso en ventaja. Iban 10 minutos, Francisco Ilarregui cambió de frente de derecha a izquierda, al fondo llegó Leandro González para meter centro atrás, Felipe Cadenazzi remató pero la pelota dio en un defensor rival y el rebote le quedó al mismo Ilarregui, que le dio abajo y de derecha para poner el 1 a 0. Cuando no pasaba nada, Quilmes sorprendía a su rival y lo obligaba a salir más decidido y a dejar más espacios.

A los 21 llegó Mitre, con un remate de Martín Pérez Guedes que cruzó todo el arco y nadie llegó a empujar. Pero a los 22 el que tuvo otra fue El Cervecero, con un remate de media distancia de Leandro González y la pelota pegó en el palo derecho. El encuentro era parejo y entretenido, con llegadas por ambos lados. Si bien se jugaba más en campo de Quilmes, el local no llegaba claro y El Cervecero aprovechaba los espacios para contraatacar aunque sin resolver bien en los últimos metros. El trámite continuó igual hasta que el juez pitó el final del primer tiempo. En un juego parejo, El Cervecero lo ganaba gracias a su efectividad.

No lo pudo aguantar hasta el final
En la segunda mitad el local salió decidido a buscar el empate y se fue al ataque con mucha gente. Quilmes retrocedía y jugaba de contra pero sólo con pelotazos a un solitario Felipe Cadenazzi. Aún así, El Cervecero se defendía bien y el local no generaba peligro. A los 18 minutos entró Nicolás Castro por Cadenazzi y se paró en la izquierda, Leandro González fue a la derecha y “Tico” Ilarregui fue de punta con Jonatan Torres.

El local iba una y otra vez sin ideas y Quilmes jugaba al pelotazo de manera incesante. De uno de esos pelotazos, a los 27, Ilarregui se fue mano a mano, la quiso picar y el arquero Ezequiel Mastrolía tapó bien. Quilmes no lograba tener la pelota y el local manejaba las acciones en campo cervecero aunque sin generar peligro. A los 31 y para poder tener la pelota, entró Miguel Caneo por Jonatan Torres, y a los 41, Matías Tissera lo hizo por un agotado Ilarregui. En los minutos finales el local fue a buscar con todo, totalmente expuesto en defensa, y El Cervecero desaprovechó varias posibilidades para liquidar la historia de contra. Sin embargo el local seguía yendo, y de tanto ir llegó al empate.

A los 43, pelotazo largo del arquero Matrolía, peinaron la pelota en tres cuartos anticipando a Tomás López, recibió Matías Moisés en el área apareado con Tobías Albarracín, remató y tapó Trípodi, pero el rebote derivó para Joaquín Quinteros, que definió contra el palo derecho sobre la salida del uno. Mitre lo empataba cuando casi no había generado peligro. El gol derrumbó a un Quilmes que ya no pudo reaccionar hasta que el juez pitó el final.

Con sabor a derrota
El empate terminó siendo justo porque luego de un primer tiempo parejo en el que Quilmes lo ganaba por haber sido más efectivo, en la segunda mitad todo fue del local, aunque sin ideas y sin situaciones. Sin embargo y después de haber desperdiciado un par de contras para liquidarlo, a dos minutos del final, una sucesión de errores en las marcas permitieron un empate que ni el propio Mitre esperaba encontrar.

Una igualdad con sabor a derrota que sigue dejando a Quilmes en zona de descenso (si ganaba hubiese salido) y que lo obliga a ganar al menos dos de los tres partidos que le quedan. Panorama complicadísimo para un Cervecero que ayer mereció más suerte ante un pobre Mitre, pero que no le alcanzó.