Quilmes: Lo detuvieron, murió en la comisaria, y su familia sostiene que lo asesinaron
Un hombre de 41 años luego de ser aprehendido por un presunto robo a una mujer se habría suicidado en una celda de la Comisaría Séptima de Quilmes, según la versión de los efectivos policiales. La familia del hombre sostiene que a él la policía lo mató a golpes. «Se les fue la mano», aseguraron los allegados.
El sujeto se dedicaba a hacer changas y juntar cartones,ése era «su estilo de vida» según detalló su familia.
El sábado 23 de marzo se dirigió a realizar una changa a pocas cuadras de su casa.
«No sabemos bien qué paso si le pagaron o no pero él se va con la carretilla y la pala la cual le habían prestado y debía devolverlas, después se compró una bebida alcohólica y
se quedó sentado en la esquina a una cuadra de dónde él vivía y a dos cuadras y media de donde hizo la changa», explicó Romina, sobrina del hombre, en comunicación con Diario Conurbano.
Mirá también:
Accidente trágico en El Pato: Un camión salió de la Ruta 2 y se llevó puesta una parrillaEl hombre,
había trabajado en la casa de una mujer policía la cual minutos después de que él se retirase fue a buscarlo argumentando que le había robado herramientas de trabajo.
«Según testigos la mujer llama a la policía pero los efectivos de un patrullero no lo querían llevar ya que no tenía denuncia y tampoco tenía las cosas que ella decía que le había robado. Después
llega otra patrulla en la cual viene un familiar de la supuesta damnificada, ahí lo convencen a mi tío de solucionar el problema en la Comisaría Séptima del barrio Santa María, en Bernal», detalló Romina.
La familia fue anoticiada del
supuesto suicidio del hombre la madrugada del día 24 de marzo pero ellos nunca creyeron en la versión de los policías.
«No lo ahorcaron porque él no tenía marcas en el cuello, sí
estaba todo golpeado, tenía las costillas rotas y los dedos quebrados. Seguramente se les fue la mano y la quisieron dibujar», agregó la sobrina de la víctima.
Días después del fallecimiento, familiares y amigos
se movilizaron hacía la Comisaria Séptima de Quilmes en reclamo de justicia ya que sostienen que fue asesinado luego de ser torturado.
La dirección de
Prevención de Violencia Institucional del Municipio ya trabaja en el caso que está a cargo del fiscal Martín Conde de la UFI 3 de Quilmes.