El hecho, registrado en la madrugada de este jueves, fue advertido por un vecino que salía a trabajar, quien dio inmediato aviso al 911. El sospechoso caminaba por las inmediaciones de las calles Ribereño Las Piedras y 819 portando un arma larga, causando temor en la gente del barrio, que desconocía sus intenciones.

Al comisionarse en la zona indicada, el gabinete operativo de la Seccional realizó un rastrillaje hasta dar con el sindicado. En efecto, el individuo portaba una escopeta calibre 16 milímetros y fue sorprendido justo en el momento en que le propinaba golpes a un auto estacionado en la vía pública. 

Tras un breve forcejeo, los uniformados consiguieron reducirlo sin que hubiera heridos. En el acto le incautaron el arma, que quedó a disposición de la Justicia. En tanto que el malandrín fue trasladado a la Comisaría Cuarta imputado por “portación ilegal de arma de fuego”, aunque los investigadores intentan determinar las verdades intenciones del acusado y establecer el origen de dicha escopeta.