Como cada uno de los 10 años que tienen de servicios ininterrumpidos a las personas en situación de calle, el programa Quilmes Mi Casa invita a los vecinos a sumarse a la Cena Anual que tendrá lugar este viernes a las 21 en el salón de calle Olavarría 319 de Quilmes centro, de la Iglesia del Encuentro.

De esta manera, abonando los mil pesos ($1.000.-) de la tarjeta, no sólo podrán disfrutar de una espléndida velada con una sabrosa comida con el show de dos grandes artistas, sino que contribuirán a sostener este programa de la Fundación Hechos.



El gran tenor bernalense Marcelo Gómez será el broche de oro de la noche, así como el violinista callejero Cristian Villalva, artistas que han donado su actuación al programa en otras oportunidades también.

Mientras tanto, un cheff quilmeño preparará el menú, quien también dona su arte culinario a la Fundación Hechos. Durante la velada se hará el sorteo de una moto 0km, donada por un voluntario para hacer más atractiva la velada.

Cabe recordar que el programa Quilmes Mi Casa nació para dar acogida a la niñez y adolescencia en situación de calle, pero en el fragor de la tarea se atienden también a adultos en la misma situación. 



Con los años, la tarea se fue diversificando y especificando, porque no sólo brindan cenas los lunes, miércoles y sábados en la plaza de la Estación de Quilmes a grandes y chicos, sino que jueves y viernes atienden a los niños y adolescentes en la sede del Hogar Dios Suplirá, donde meriendan, se bañan, reciben ropa limpia, hacen talleres y cenan. Ofrecen además cada  miércoles el servicio de merienda con apoyo escolar a los niños, y a las mamás adolescentes, distintas charlas formativas.

Para las fiestas organizan entrega de cajas con alimentos dulces y salados a la familia de los niños del programa, para evitar que esa noche tengan que salir a mendigar, y en pleno invierno hacen recorridas con ropa de abrigo y frazadas para los adultos que viven en la calle. Al inicio del año escolar entregan útiles y zapatillas a los niños, y hacen un seguimiento para evitar que deserten.



Para adquirir la tarjeta o informarse sobre el programa, podrán llamar al celular11-5979-7099 de 15 a 20.

ANSIEDAD
El coordinador de Quilmes Mi Casa, Norberto Almada, expresó que “faltando unas horas para la Cena, todo es expectativa, ansiedad, pero al mismo tiempo, estamos disfrutando cada instante. Nos vamos enterando que va a venir uno u otro, y es una alegría saber que los vecinos se van sumando para compartir con nosotros, muchos que han estado acompañándonos durante muchos años. Así que siempre estamos esperando que se sume alguien más”.



“Hay mucha acción y alegría en la cocina, en los que están trabajando en la ornamentación del salón, en los iluminadores, en el equipo de video; mucha alegría en los voluntarios que siguen llevando adelante la tarea, porque todos los servicios siguen funcionando con normalidad. Y este viernes será una jornada similar, en la que seguiremos trabajando en los preparativos mientras que los servicios a las personas en situación de calle continúan”.

“Estamos preparando muchas sorpresas para la Cena, lo que demanda un esfuerzo extra; hay sorpresas no sólo para los invitados, sino también para los voluntarios y por eso insistimos en que ninguno se lo pierda. Entonces hay que guardar el secreto y ser muy discretos para no arruinar las sorpresas”, señaló el coordinador del programa.



“Una de las cosas que aprendimos en Quilmes Mi Casa, es que si logramos alcanzar a un solo chico de la calle, todo el trabajo vale la pena. De la misma manera querríamos que viniera todo el mundo a la Cena, pero no se puede, entonces esperamos que todos los que vengan disfruten de lo mejor que tenemos para compartir y nos alegraremos juntos”.

“Vaya la invitación a todos los vecinos de Quilmes, y nuestro agradecimiento a tantas personas que durante estos diez años han colaborado con el programa. Por eso queremos invitarlos a todos, porque todos han participado de una u otra manera en este servicio. Esperamos que la próxima década nos encuentre haciendo lo mismo, siendo de valor no sólo a la gente de la calle, sino también a cuanta gente solidaria hay en nuestra ciudad”, agregó Almada. 



“El tiempo que vivimos en nuestro país es muy particular, así que necesitamos encolumnarnos detrás de iniciativas como éstas. Vamos, que juntos las cosas nos salen mejor  y se pueden lograr cosas muy lindas, beneficiamos a muchos y nos alegra el corazón. Y ninguno de los que participaron en estos diez años se empobreció por ayudar, nadie perdió, sino que ganamos todos. Y eso es una providencia de Dios”, finalizó.