El jubilado sufrió una repentina descompensación mientras aguardaba para hacer un trámite dentro de la entidad bancaria. El suceso causó conmoción en los clientes que por entonces se encontraban dentro de la sucursal. Algunos se vieron en shock, sin poder reaccionar ante la situación crítica que se vivía en el lugar. 

De inmediato se dio aviso a la central de emergencias, que comisionó al lugar una ambulancia del SAME con apoyo de móviles de la Patrulla Urbana comunal. Mientras tanto, empleados de la sucursal le practicaron maniobras de RCP para intentar reanimarlo, aunque lamentablemente no tuvieron éxito. 

Pese a los esfuerzos y a que la unidad tardó apenas tres minutos, según fuentes intervinientes, no fue posible salvarlo y los médicos constataron la muerte cerca de las 10.35. Estiman que se trató de un ataque cardíaco. El cuerpo quedó a resguardo de efectivos policiales hasta su traslado a la morgue judicial, para su posterior entrega a los familiares.