Si bien el químico no es más que agua oxigenada, la cual no sería inflamable, desde la entidad se mostraron preocupados dado que desconocen el nivel de concentración que ésta tiene y la toxicidad que puede producir a la salud y al ambiente. 

Por otra parte, Pavón solicitó a las autoridades municipales una inspección en el lugar, ubicado en Camino General Belgrano y Los Andes, a los fines de determinar si cuenta con la habilitación y las medidas de seguridad para poder mover y apilar los tanques. Y señaló que los mismos se encuentran “a la intemperie y sobre la tierra” y no en un lugar asfaltado.

“La denuncia fue realizada dentro del marco de un pedido para dar seguridad a la población escolar de la Escuela Nº 33 y con el apoyo de varias entidades intermedias de la zona. También notificamos de esto al Consejo Escolar de Quilmes, pero no quisieron tomarme la denuncia”, criticó Pavón, que además es presidente de la Asociación Cooperadora de la Escuela Nº 36.