La joven percibió que los sujetos la habían despojado de su teléfono bajo la modalidad conocida como “punga”, sacándolo de su bolsillo discretamente. Inmediatamente pidió ayuda a oficiales de la Policía Local que se encontraban en tareas de prevención, quienes comenzaron un rastrillaje para dar con los delincuentes. 

Muy cerca de allí fueron vistos los sospechosos, de similares características, por lo que impartieron la voz de alto y los redujeron. Los individuos, de 25 y 39 años, se habían dividido el botín a los fines de hacerlo pasar de ser percibido: uno tenía el celular Samsung J5, mientras que su cómplice llevaba la funda y la batería. 

En tanto la víctima del robo reconoció el teléfono como el propio, lo que motivó la detención de los bandidos y su posterior traslado a la Comisaría Primera, imputados por el delito de “tentativa de hurto”.