Con el descenso a la vuelta de la esquina, desde la actual dirigencia del club se empieza a buscar responsables. Y el principal apuntado es Luis Andreuchi, que participó del armado del actual plantel. El empresario y campeón con El Cervecero en 1978 habló anoche en los micrófonos de "EL SHOW DE QUILMES", por RADIO FAN 103.9 FM, y se despachó contra todos.
Luis Andreuchi comenzó anoche su charla con "EL SHOW DE QUILMES" refiriéndose al porcentaje de responsabilidad que tiene en este presente del equipo al haber armado parte del plantel. El campeón de 1978 dijo que "del uno al cien, mi responsabilidad de este momento es cero. No me siento responsable en absolutamente nada. Yo no empecé el campeonato. Sólo jugamos un partido. La única responsabilidad que tengo es que el equipo que armé yo haya perdido contra Unión Aconquija en Copa Argentina. Nada más. Todos los de la dirigencia actual que me echan la culpa solamente a mí están equivocados. Además hay varios que ya estuvieron con la Azul y Blanca en todos estos años. Yo me acuerdo cuando (Carlos) Coloma estaba con los Rojo Punzó. También me acuerdo cuando (Uriel) Vecchio venía a buscar plata a mi casa estando con la gestión anterior. Se hizo todo mal, pero fue cuando agarró Julio García que comenzó la debacle. García, que seguramente nunca en su vida jugó al fútbol".

- Pero García es el vicepresidente segundo_
- Pero es el que manda. Aunque Julio García hace lo que le dicen Fabián López y Daniel Razzetto. (Marcelo) Calello está totalmente pintado en el club, está para participar de los festejos del Día del Niño y esas cosas. Yo lo que puedo decir es que me mintieron en la cara. Me dijeron que me iban a pagar todo lo que había puesto y no lo hicieron. Esta gente tiene mucho odio, mucho resentimiento. No lo digo porque me echaron a bolsazos del club, apenas asumieron fueron a cambiarle el nombre al estadio, además de otras cosas que hicieron con varios empleados. Me echaron a mí y vino un tipo como Humberto Zucarelli, que fue técnico, representante, manager y coimero. Nunca hizo las cosas bien. A todos los jugadores que eran representados por mí los bajaron. Y así, los carneros como (Diego) Colotto tuvieron más lugar.

- ¿No se equivocó en los jugadores que eligió para armar este plantel?
- Primero, yo los traje para la idea de (Marcelo) Broggi, que era el técnico que yo contraté y que le pagué los dos meses de sueldo de mi bolsillo. La idea de él era un 4-4-2 con una característica determinada de jugadores que él me pedía, y dentro de lo que pudimos los trajimos. Lo echaron y trajeron a (Alfredo) Grelak. Ahí supe que podía pasar lo que está pasando. Regaló treinta puntos que llevaba de ventaja, cuando ganaba o cuando perdía, siempre hubo dos o más cambios por partido en el equipo titular. ¿Qué confianza le vas a dar a los jugadores así? Por eso no me gustan los cuerpos técnicos nuevos numerosos, que tienen psicólogos, parapsicólogos, pero después no ganan un partido. Yo traje jugadores para otro técnico y los que pude. ¿Qué me pueden cuestionar a mí si hice todo con muy pocos recursos? He perdido plata, llamaba a los jugadores y se negaban venir a Quilmes porque les debían un montón a sus colegas.

El dolor por el presente, la deuda y el concurso preventivo de acreedores
Más allá de ser un personaje polémico y que haya recibido muchos cuestionamientos por parte de un sector de los hinchas de Quilmes en el último tiempo, Luis Andreuchi lamenta la posibilidad de que se pierda la categoría. El empresario confesó: "¿Cómo no me va a doler lo que pasa con Quilmes? Yo vine de Rosario Central pero me siento muy identificado con este club. La camiseta tiene una sola estrella y yo fui una de las figuras de aquél campeonato. Me siento un histórico. Soy el que más partidos tiene, el que más caro vendieron. La única estrella de verdad es la del 78, las otras son inventadas. Pero bueno, no siento rencor con nadie. Simplemente me hizo mal todo lo que pasó en este tiempo". Andreuchi siguió recordando que su trabajo con este plantel: "fue el que yo sugerí para después poder cobrar la plata que me debían. Traje a los jugadores que traje porque sólo iban a ganar veinte mil pesos. Otra cosa no podíamos hacer. Deposité en el club doscientos mil dólares. Tengo todas las pruebas, pero ahora nadie se hace cargo de lo que yo pagué. En la convocatoria presenté lo poco que pude demostrar. Hay cosas que obviamente son imposibles de cobrar".