La piel en la zona del cuello y del escote es fina y delicada. Posee una menor concentración de glándulas adiposas y por ello es muy importante extremar los cuidados para evitar arrugas, flacidez y manchas.
En los días de calor, en general, y durante el verano en particular, esta zona está mucho más expuesta que el resto del año al polvo, diversos agentes externos y rayos ultravioletas. Como es una zona que suele estar tapada por la ropa, no solemos darle la debida importancia hasta que aparecen las primeras señales del envejecimiento prematuro. Por ello lo más importante es la prevención:

* Hay que prestarle la misma atención que a la piel del rostro.

* Si salimos a caminar, hacerlo de una manera erguida y con el cuello recto, para favorecer la firmeza de esa zona.

* Debemos estar atentos además a ciertos hábitos, como malas posturas para dormir y trabajar frente a una PC, o la lectura en la cama. La zona del cuello y el escote debe permanecer relajada en nuestras distintas actividades cotidianas.

* Al igual que con el rostro, la zona del cuello y escote debe tener su rutina diaria de limpieza y revitalización.

* Debemos acostumbrarnos a lavarnos la zona con agua fría, a realizarnos una limpieza diaria, tanto de día como de noche, con buenos productos en la zona y según el tipo de piel o edad.

* Es recomendable una buena exfoliación periódicamente, para mejorar la oxigenación y eliminar las células muertas de la piel.

* Una cuidada exposición al sol, en las horas permitidas y el uso de protectores solares en la zona es muy importante. Evitar la radiación solar "directa" tanto en el cuello como en el escote.

* Una buena alimentación: sana, variada y equilibrada.

Actualmente, las empresas han desarrollado tratamientos especializados focalizados en esa zona, para reducir la flacidez, disminuir las arrugas, incrementar la densidad de la piel y devolverle luminosidad.
En términos generales, todas las personas deben cuidar esta zona del cuerpo aplicando el mismo criterio y productos que se utilizan para el cuidado del rostro. Esto es:

* Durante el día: utilizar cremas con filtro solar alto, que además de hidratar y aportar activos antiage, a la piel, la protege contra los daños del sol e impide la aparición de arrugas, manchas o enrojecimiento.

* Por la noche: las cremas deben ser más nutritivas y reparadoras, ya que es el mejor momento para hacerlo. Las cremas especializadas para la zona brindan un efecto reparador intensivo, que deja la piel más hidratada, firme y con menos arrugas.

CAMBIO DE HÁBITOS
A la hora de realizar una rutina de ejercicios para la zona, que permita tonificar o disminuir la flacidez, se recomienda:

- Realizar una amplia sonrisa, exagerada, hasta sentir que se contraen los músculos del cuello. Se puede hacer en cualquier momento del día y lugar.

- Con el rostro erguido, colocar una muñeca contra otra, a la altura del pecho. Empujar una contra la otra para ejercer resistencia y mantener la posición durante 10 segundos. Luego repetir invirtiendo la posición de las muñecas.

- Sentada con la columna derecha y los hombros hacia atrás, realizar un movimiento circular lento con el mentón, comenzando por la izquierda. Al finalizar el círculo, hacer lo mismo en sentido contrario. Repetir 10 veces de cada lado, todos los días.