Se trata de un viejo reclamo que mantienen los sindicatos con la prestataria médica. Las quejas más frecuentes se deben a que el lugar no les reconoce los días de reposo indicados por los médicos a los maestros enfermos. Además, afirman que tampoco son revisados clínicamente, por lo que la decisión de no otorgar los días sería arbitraria.
Por otra parte, según aseveran los gremialistas, reciben constantes maltratos por parte de la empresa. De esta manera, lo que solicitan es que el servicio sea estatizado, puesto que consideran que se paga demasiado por el mismo, y que los docentes puedan ser atendidos en hospitales públicos y de manera gratuita.