Desde el viernes están sin clases, debido a que no logran solucionar los desbordes de aguas servidas. Tras enterarse en el Consejo Escolar de que la obra de reparación del establecimiento, se encuentra en el orden de prioridad número 20, decidieron hacer una manifestación pública para que a la brevedad se logre normalizar la situación.
Graciela Maidana vocera del Suteba Quilmes, explicó a PERSPECTIVA SUR que el de los líquidos cloacales “es apenas uno de los problemas de infraestructura que tiene esta escuela, pero ahora es el más acuciante. No se puede dictar clases en medio de la inmundicia”.
Para colmo de males, la escuela secundaria 18 que ocupa el primer piso del edificio, el viernes recibió una cuadrilla que les reparó los baños, “pero los caños filtran aguas servidas que corren por las paredes, y suman riesgo de contaminación”.