Muchas veces nos pas que pensamos que se usaban de una manera y resulta que no. Por eso mismo, vamos a ver qué es lo que usamos mal y así lo evitamos.


1. Usar mucho tiempo el mismo aceite en la freidora
Las freidoras son muy útiles, pero después de cierto tiempo es mejor remplazar el aceite usado por nuevo. Sucede que freír con aceite quemado no es muy agradable y el sabor que le da a la comida no es precisamente apetitoso.



2. No limpiar el filtro del lavarropas
El mal uso del lavarropas puede provocar que el centrifugado y el lavado sean defectuosos. Si no limpiamos los filtros de pelusa, se puede bloquear la descarga de agua.


3. Colocar demasiada comida en el freezer
Al hacer esto no permitimos que el aire circule por toda la zona y los alimentos no terminarán de congelarse ¿El resultado? Alimentos echados a perder, dinero tirado y una heladera dañada.


4. Triturar cosas duras con la licuadora
Si nuestra licuadora no es apta para triturar hielo será mejor que hagamos lo que dicen las instrucciones, ¡no forcemos el motor! De lo contrario no durará mucho tiempo y tendremos que gastar más dinero comprando una nueva.


5. No limpiar el horno
Dejar sucio el horno luego de derrames puede corroer las paredes del horno y hacer que necesitemos llamar a un técnico especializado que no solo nos cobrará mucho dinero sino que nunca lo dejará igual.



6. Poner cosas en el freezer que no deben ser congeladas
Colocar alimentos en el freezer como tomates u otro tipo de verduras que no deben estar allí es la fórmula para el desastre.


7. Cocinar huevos enteros en el microondas
¡Nunca lo hagas! Si ponés un huevo con cáscara y encendés el microondas, lo único que lograrás es que explote y manche todo el interior de tu horno. Lo mejor es romperlo y cocinarlo sin la cáscara.


Ahora que ya sabes qué cosas no debes hacer con los electrodomésticos para que no se rompan. Lo mejor es evitar hacerlas y seguir siempre las instrucciones de los manuales.