Luis Miguel y Alejandra, papás de Simón, estaban nerviosos por la llegada de su pequeño de casi dos años a la guardería.
A ambos les inquietaba cómo se comportaría con otros niños, si lloraría mucho, si se sentiría cómodo con sus nuevas profesoras y, sobre todo, el hecho de que estarían separados gran parte del día por primera vez.
En este punto de la historia, ¿te sentís identificado? Esa primera experiencia escolar es difícil para padres e hijos, por lo que éstas son algunas recomendaciones para que la guardería les deje a todos bonitos recuerdos y no se convierta en un trauma.

Para empezar, ¿qué le pasa al niño cuando se separa de vos?
Siente mucho miedo y ansiedad. Si es menor de un año puede que no note tu ausencia pero, si supera esa edad, para él puede ser un trauma que no estés cerca.

Y los padres, ¿qué experimentan?
Una palabra lo encierra todo: culpa. También hay mucha inquietud frente a la seguridad de los niños (que no vayan a caerse o a perderse, por ejemplo) o su alimentación.

¿Qué hacer entonces?
- No le transmitas miedo o inseguridad. Mostrate positivo y alegre.
- Dale elementos con los que se sienta tranquilo: una cobija, un peluche, una capa o un saco. ¡Lo que le dé tranquilidad!
- Sé afectuoso pero firme.
- Dejar al niño en el aula de clase y que otra persona lo distraiga mientras te vas no es bueno. Por el contrario, esto lo puede inquietar más. Es mejor despedirse y decirle que va a divertirse, a jugar y a aprender con nuevos amigos, y que en unas horas van a estar juntos otra vez.

¡Cumplí tus promesas!
Si dijiste que vas a recogerlo antes del almuerzo, no llegues tarde.

Y vos como padre, ¿qué debes hacer para estar más tranquilo?
- Elegí una guardería que te dé confianza. Conocela bien, recorrela y hablá con las profesoras.
- Hacé que los primeros días las jornadas en la guardería no sean tan largas. ¡Te sentirás mejor y tu hijo te lo agradecerá!
- Expresá tus sentimientos con otros padres, recomendá los profesionales.
- Dedicale tiempo a tu hijo para que tanto él como vos vean compensado el que no pasan juntos.

Para terminar, ¿cómo sé si mi hijo no está contento en la guardería?
- Está triste gran parte del día.
- Tiene problemas para dormir o pesadillas.
- Presenta cambios negativos en su carácter o dependencia extrema hacia ti.