En Puerto Madre, Quilmes se reencontró con la victoria después de nueve partidos. Fue ante Guillermo Brown, y si bien no lució y de hecho en gran parte del encuentro no jugó bien, supo desequilibrar en la última media hora con los cambios que hizo el DT Mario Sciacqua y lo ganó sobre la hora. Desahogo total en el plantel.
El partido comenzó con Quilmes adelantado, yendo a buscar el arco rival. Sin embargo, en su primera llegada, el local se puso en ventaja. Pelotazo largo con la defensa desordenada, no pudo rechazar Juan Larrea y Fabrizio Palma lo anticipó y se escapó, metió el centro bajo desde la izquierda y Matías Rojo recibió al borde del área chica y mano a mano con Emanuel Trípodi, lo dejó en el camino y definió arriba y de zurda para el 1 a 0 a los 4 minutos. Otro error en el retroceso obligaba a Quilmes a afrontar otro partido cuesta arriba. A los 5 llegó con un remate de Leandro González apenas arriba, aunque el gol golpeó duro a un Cervecero que no encontraba los caminos. Brown tampoco iba claro y así el partido se hacía malo y deslucido. En los minutos finales Quilmes empezó a ir con algo más de gente, merodeaba el área pero no lograba ser profundo. Hasta que a los 45, tras un corner desde la izquierda de Federico Álvarez, Juan Larrea peinó de cabeza en el primer palo y Miguel Caneo la empujó de derecha adentro del área chica para poner el 1 a 1. Gol clave y psicológico para irse al vestuario con algo de esperanza, porque Brown sacó del medio y se terminó la primera mitad. El empate estaba bien porque los dos habían hecho muy poco como para merecer estar en ventaja.

DESDE EL BANCO, EL EQUIPO CAMBIO LA CARA
En la segunda mitad y para tener más la pelota, Gabriel Ramírez ingresó por Augusto Max. Quilmes salió algo más decidido y con más gente en campo rival, y así llegó a los 2 minutos cuando Leandro González no pudo definir en el área chica cuando le salía el arquero Sebastián Giovini. Y tres minutos después, otra: remate de afuera de Matías Mansilla y controló bien el arquero. A los 18, Francisco Ilarregui ingresó por un agotado Miguel Caneo, se paró en la izquierda y Leandro González fue de punta con Alex Silva. Con el ingreso de "Tico", El Cervecero logró acercarse más al área rival, sobre todo con sus arrestos individuales, aunque no terminaban en situaciones de peligro. Brown iba con pelotazos largos y centros imprecisos. A los 32, el DT Mario Sciacqua hizo el último cambio, con el ingreso de Jonatan Torres por Leandro González, buscando más aire adelante. Los últimos diez minutos encontraron más entero a Quilmes, que con recambio en el ataque, iba con algo más de insistencia aunque sin claridad. Y de tanto buscarlo, a los 42, llegó el gol tan ansiado. Tiro libre corto de Gabriel Ramírez a la izquierda para Federico Álvarez cuando todos pensaban que iba a ir directo al área, centro por bajo que desvió Jonatan Torres en el primer palo y Alex Silva la empujó en el segundo para el 2 a 1. El gol derrumbó al local y agrandó a Quilmes, que a los 44 volvió a llegar con un mano a mano de Jonatan Torres, pero tapó Giovini. En los instantes finales el local lo buscó como pudo pero Quilmes se defendió bien y terminó celebrando la victoria.